Ministerio de Comunidades

ILUMINACIÓN DOCTRINAL

El Papa Francisco afirma que “la parroquia no es una estructura caduca” (EG 28). Nuestro proceso evangelizador tiene su espacio vital en el ámbito parroquial. Allí se da el primer anuncio y se inicia el proceso de gestación de las pequeñas comunidades. Nos dice el Santo Padre que “la parroquia es presencia eclesial en el territorio, ámbito de la escucha de la Palabra, del crecimiento de la vida cristiana, del diálogo, del anuncio, de la caridad generosa, de la adoración y de la celebración. A través de todas sus actividades, la parroquia alienta y forma a sus miembros para que sean agentes de evangelización. Es comunidad de comunidades, santuario donde los sedientos van a beber para seguir caminando, y centro de constante envío misionero” (EG 28). Podemos afirmar que todas estas características de la comunidad parroquial, se viven en el nivel de la pequeña comunidad. No olvidemos que la comunidad cristiana es un lugar teológico en donde reside la presencia de Cristo Redentor. En la pequeña comunidad se fortalece esta presencia.



OBJETIVO GENERAL

Acompañar y asesorar a los hermanos que están viviendo la fe en los distintos niveles de comunidad, fortaleciendo en ellos los lazos humanos, espirituales y pastorales que los unen, para que caminando hacia una fe adulta, lleguen a ser en la Iglesia verdaderos discípulos misioneros del Señor, para la edificación de su Reino.



OBJETIVOS ESPECÍFICOS

  1. Desde la etapa de Koinonía, tratar de adquirir un conocimiento más cercano de las personas, con el fin de lograr   una mejor conformación de las nuevas comunidades.
  2. Tener en cuenta el adecuado perfil en la elección de los coordinadores internos y externos, para que con   madurez humana y espiritual guíen las comunidades.
  3. Lograr un discernimiento sencillo para descubrir los carismas de cada una de los hermanos con el fin de   encaminarlos hacia los ministerios.
  4. Velar para que los miembros de la pequeña comunidad, entiendan que es el Espíritu Santo quien convoca,   congrega y santifica a todos los hermanos.
  5. Infundir en los hermanos de comunidad el espíritu de la misión universal.



LÍNEAS DE ACCIÓN

  1. Fomentar la amistad sincera, la apertura y solidaridad entre los hermanos, con el fin de valorar cada persona,   dentro de la pequeña comunidad.
  2. Velar por el orden que se debe seguir en la pequeña comunidad, de tal modo que se lleve a cumplimiento,   todos los pasos previstos para el encuentro semanal.
  3. Detectar a tiempo el surgimiento de conflictos internos en la pequeña comunidad, buscando soluciones   adecuadas.
  4. Cualificar a los coordinadores, para que su servicio sea de mayor calidad humana y espiritual. Programar   capacitaciones mensuales.
  5. Lograr, en la medida de lo posible, que los miembros de las pequeñas comunidades habiten en la misma área   parroquial.